LA ROSA DE NAVIDAD: HELLEBORUS
LA ROSA DE NAVIDAD: HELLEBORUS
Siempre espectacular: una planta que florece cuando la mayoría de las plantas de jardín están hibernando.
La Rosa de Navidad
El Helleborus, también conocido como la Rosa de Navidad, nos regala sus grandes flores blancas, con una hermosa corona de estambres en el corazón, de noviembre a marzo. Las hojas son de color verde oscuro y al tocar parecen un poco a cuero. La planta soporta la nieve o escarcha: las ramas se colgarán ligeramente, pero en cuanto suben las temperaturas, el Helleborus se elevará de nuevo.
Además de la versión blanca, cuyas flores ya reciben un toque verde de cara a primavera, también hay otros colores disponibles, como los del Helleborus orientalis. Esta planta de jardín también es de hoja perenne, pero sus flores van desde el blanco, amarillo y albaricoque hasta el rosa, púrpura oscuro y moteado.
Origen
En la naturaleza, la rosa de Navidad crece en las regiones montañosas del centro y sur de Europa y de Asia Menor. La primera mención conocida de la planta data del 1400 AC, cuando el vidente / doctor Melampus escribió sobre ella. La planta viajó con emigrantes a los Estados Unidos, donde la planta de flor de invierno, simboliza los pioneros y la supervivencia.
Curiosidades sobre el Helleborus
- El nombre del Helleborus proviene del griego ‘helein’ (matar) y ‘bora’ (alimento), una advertencia de que la planta es venenosa.
- Según una antigua leyenda, la primera rosa de Navidad en Belén surgió de las lágrimas de un pobre pastor. Él no tenía un regalo para el niño Jesús y así podía darle flores.
- Helleborus juega un papel en muchos cuentos populares. En la Edad Media la gente esparcía las flores en el suelo de sus casas para alejar a los espíritus malignos. Bendijeron a sus animales con una rosa de Navidad, pero al mismo tiempo creían que las brujas usaban la planta para su maldición y que los magos se hacían invisibles con ella.
Como mantenerle guapo
- Ponga el Helleborus en un lugar protegido y soleado. Cuanto más está en la sombra, menos flores produce.
- La propia planta indica cuando necesita más agua, dejando que cuelguen las hojas. Después de unas horas, el Helleborus se levanta de nuevo.
- Si está congelada, no la riegue: la planta apenas consumirá nada.
- Con abono, una vez cada dos semanas, estimularás una floración extra larga y más frondosa.
